El ÁRBOL QUE REPRESENTA A DIOS

Me gustaría hablarles un poco de lo que hemos aprendido en estos últimos años sobre la Escritura. Todo inició aproximadamente hace 12 años, cuando conocimos a nuestros buenos amigo Jack y Lucy. Ellos provienen de Canadá, principalmente para enseñar de las Sagradas Escrituras en temporada de invierno en mi país, la cual ha sido de mucho provecho para nosotros. Ellos tomaron la decisión de enseñar lo que han aprendido en su frio país y llevarlo a la ciudad del sol.

Hermosillo es la capital del estado de Sonora, y es una de las ciudades más calientes en México en temporada de verano, llegando alcanzar hasta los 45°C, pero Sonora también es uno de los estados que tiene una gran variedad de ecosistemas; ahí podemos encontrar montañas, mar y un gran desierto.

En nuestra ciudad hay muy poca agua y por consecuencia poca vegetación, pero aun así en esta zona desértica se ha podido sembrar y tener árboles frutales. En una ocasión un ingeniero agrónomo me comentó algo muy interesante y es que los frutos y semillas producidas por los árboles frutales que se encuentran en zonas desérticas; son de la mejor calidad, porque tienen el propósito de llevar vida en situaciones adversas y buscan hacerlo a pesar de las condiciones no favorables.

Árboles en el Jardin en Edén

En el tiempo de enseñanza con mi amigo Jack, cada día las preguntas han ido aumentando sobre la Biblia (gracias por tu tiempo amigo). Uno de los temas que marcó mi vida y la sigue marcando, es la enseñanza del Toráh; la cual fue impartida en mi congregación Árbol de Vida por el maestro Dr. Konkel. Es ahí donde me gustaría que iniciáramos, en el principio.

Génesis 2:8 NTVDespués, el Señor Dios plantó un huerto en Edén, en el oriente, y allí puso al hombre que había formado. El Señor Dios hizo que crecieran del suelo toda clase de árboles: árboles hermosos y que daban frutos deliciosos. En medio del huerto puso el árbol de la vida y el árbol del conocimiento del bien y del mal.

Génesis 2:8 NTV

En el principio creo Dios los cielos y la tierra, y el SEÑOR plantó un huerto en Edén. En este huerto el hombre convivía constantemente con Dios, en la parte central de este huerto se encuentra un árbol llamado el Árbol de la Vida; pero también se encuentra en ese lugar el Árbol del «Bien y del Mal».

La manera en que el autor narra la historia de la Creación, es para que sea comprendida como un templo (algo comun en el mundo antiguo), y en lo más alto de un monte el SEÑOR, colocó un huerto en la region de Edén. Donde podemos apreciar la presencia del SEÑOR con más intensidad, así como el lugar santísimo en el Tabernaculo o el Templo; y es ahí donde se encuentran estos árboles según Génesis.

Pero ¿qué hay de especial en estos árboles? ¿Qué nos quiere decir el narrador sobre ellos? En el pasado, cuando yo leía la historia de la Creación siempre ignoré el Árbol de la Vida, nunca pensé que fuera relevante para la historia y para mí; de hecho, se dice que Génesis es considerada muy aburrida por sus lectores hasta después del capítulo doce.

Lo que siempre aprendí era que el punto central era el Árbol del «Bien y del Mal» o del «Conocimiento», siendo visto como un árbol prohibido por Dios por que llevaría a la muerte. Pero creo que esto es un poco diferente a lo que el autor nos quiere expresar, lo que podemos ver es que ambos árboles se encuentran en la parte central de este huerto donde la presencia de Dios es muy palpable. Creo que la meta principal del narrador es mostrarnos al SEÑOR por medio de estos dos árboles.

Por un lado, el Árbol de Vida representa el poder del SEÑOR de crear y dar vida al alcance de todos, recordemos el contexto de la historia (El SEÑOR creando y dando vida); y de hecho, el mandato que el SEÑOR dio a los humanos es, que coman de cualquier árbol del huerto incluyendo el Árbol de la Vida, en pocas palabras les dio autoridad de ingerir la vida que proviene del SEÑOR.

pero el Señor Dios le advirtió: «Puedes comer libremente del fruto de cualquier árbol del huerto, excepto del árbol del conocimiento del bien y del mal. Si comes de su fruto, sin duda morirás».

Génesis 2:16-17 NTV

Unos versos más adelante podemos ver una declaración importante ya que según el relato «puedes ser lo que comes«, los frutos de estos árboles pueden transformar la vida de los hombres dando Vida Eterna.

¿Y qué ocurrirá si toman el fruto del árbol de la vida y lo comen? ¡Entonces vivirán para siempre! 

Génesis 3:22 NTV

Por otro lado, tenemos al Árbol del «Bien y del Mal» o mejor dicho «del conocimiento», siendo este conocido más famosamente como el que produce el «fruto prohibido». Este árbol siempre lo miré como el villano de la historia, pero creo que en un sentido también puede llegar a representar al SEÑOR, ya que Él lo conoce todo, y se podría decir que nos recuerda lo dependientes que debemos ser a Él, nuestra mente es finita y no lo sabemos todo. De esta forma al negarse a comer de ese fruto, el hombre dependía totalmente del conocimiento del SEÑOR, acudiendo a Él por guianza ante cualquier situación tal como un hijo acude a su padre por consejo.

Regresando al relato, según del fruto que comes este transforma la vida del hombre, comer del fruto del Árbol del «Bien y del Mal» es una declaración directa en contra del SEÑOR, en su mismo Templo; Gritando que no es necesario en nada para nosotros ya que “sabemos” tomar decisiones para nuestro beneficio; este es uno de los motivos por los que trae muerte. Adam y Eva estan rechazando la dependencia del SEÑOR y al mismo tiempo que expresan no ocupar más del Árbol de la Vida.

En pocas palabras creyeron que por su forma de pensar tendrian control de la vida, así como el SEÑOR; esto inclusive puede interpretarse que ellos creyeron ser dioses.

Posterior a la traición que ocurrió en el huerto; los humanos fueron expulsados del huerto, separados del Árbol de la Vida y su acceso fue resguardado de manera divina con fuego (Gén. 3:23-24).

¿Volveremos a ver el Arbol de la Vida?

Mas adelante en la historia el se nos menciona a Moisés, y él se encuentra con el SEÑOR en lo alto de un monte, manifestándose en un «árbol» del desierto con un «fuego divino» el cual no consumía el árbol, el árbol no podía morir. ¿Esto nos recuerda algo? Yo creo que sí, los árboles en el desierto son muy secos y fáciles de consumir, pero creo que el autor nos quiere mostrar de nueva cuenta ese Árbol del Huerto, el Árbol de la Vida, y el SEÑOR le dice a Moisés que quite su calzado porque está en un lugar santo; igual como en un templo (Exódo 3:4-5).

Después el SEÑOR le pide a Moisés que guíe a su pueblo a este monte para hacer un pacto, para tomar una decisión muy importante que transformaría sus vidas, deberían dejar su antigua vida, por lo que los confrontó a tomar una decisión; ¿Seguirán al SEÑOR de la Vida? o ¿Seguirán sus hábitos de seguir viviendo para esos dioses que fueron creados por su propia manera de pensar? Lamentablemente pasó lo mismo que ocurrió en el huerto, el pueblo de Israel repitió lo mencionado en Génesis 2-3, actuaron conforme a su propio razonamiento, lo que creyeron era mejor para ellos, pero esto trajo muerte como en Génesis 3 (Éxodo 32:14-28).

Esto no terminó aquí, así como mi amigo Jack Vogt nos dejó ver en el blog, donde comentó un poco sobre la Narrativa, Contra-Narrativa y Contra-Contra-Narrativa; esto se fue repitiendo generación tras generación, siguiendo ídolos creados por el razonamiento humano, colocándolos en lo más alto de sus ciudades, montes y mentes. Ellos trataron de cubrir un lugar que le pertenece al SEÑOR y que nos ha llevado directamente a la muerte.

Esto me ha hecho pensar que tal vez el problema nunca fueron esos árboles, he podido ver que ellos nos apuntan hacia el SEÑOR, uno nos recuerda el regalo de la vida que proviene de Él y el otro que no somos capaces de poder conocerlo todo y solo hay alguien que lo sabe. No estoy tratando de enseñar una idea nueva, sino que podamos aprender juntos lo que Dios ha hablado en su tiempo y poder aplicarlo a nuestras vidas el día de hoy.

Nosotros en ocasiones queremos ser iguales al SEÑOR, ya que creemos que podemos tomar buenas decisiones para nuestra vida, pero el relato de la Creación en Génesis 1, nos muestra que esto no es así. Ya que el verdadero conocimiento solamente viene cuando dependes del Árbol de la Vida (quien lo creó todo) y crees tener del conocimento (del SEÑOR). El libro de Proverbios lo menciona, ya que nosotros no somos capaces de conocerlo todo, y lo más importante que esto solo proviene del SEÑOR.

La sabiduría es más preciosa que los rubíes; nada de lo que desees puede compararse con ella. Con la mano derecha, te ofrece una larga vida; con la izquierda, riquezas y honor. Te guiará por sendas agradables; todos sus caminos dan satisfacción. La sabiduría es un árbol de vida a los que la abrazan; felices son los que se aferran a ella. Con sabiduría el Señor fundó la tierra; con entendimiento creó los cielos. Con su conocimiento se abrieron las fuentes profundas de la tierra e hizo que el rocío se asiente bajo el cielo nocturno. Hijo mío, no pierdas de vista el sentido común ni el discernimiento. Aférrate a ellos,

Proverbios 3:15-21 NTV

Puedes percatarte que lo que el proverbio habla un pasaje lleno de «ecos» o «referencias» del relato de la Creación, creo que el SEÑOR a estado presentándose continuamente como ese hermoso Árbol del Edén y el conocimiento solo puede ser adquirido por medio de Él.

El Maestro de la Vida

Jesús, al igual que algunos autores de la Biblia, utilizó referencias sobre árboles y sus frutos para tener conexión con la historia del Génesis, para anunciar que él provenía de Dios y que era aquel que Moisés y los profetas habían hablado (Juan 1:45-50):

El Maestro de la Vida, siempre anunció que el SEÑOR continúa presentando ese gran Árbol de la Vida, y se encuentra de manera accesible para todo el ser humano que quiera seguirle. Él mismo se presentó como ese Árbol del Génesis 2 en el Evangelio de Juan.

Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.

Juan 15:1 NTV

Él Maestro también se presentó como la Vida Eterna en Juan 17:3, e invitó a todos a seguirle, y a ser trasformados por medio de este fruto; todas las personas que comieran del fruto que el Maestro ofrecía, pudieron experimentar la transformación de sus vidas por medio del conocimiento y vida del Gran Maestro al igual que los frutos en Génesis 2-3. Pero al igual que en la historia de la Génesis 2-3, él fue traicionado por un hombre en un huerto, que creyó hacía lo mejor para sí mismo.

Después de decir esas cosas, Jesús cruzó el valle de Cedrón con sus discípulos y entró en un huerto de olivos. Judas, el traidor, conocía ese lugar, porque Jesús solía reunirse allí con sus discípulos.

Juan 18:1-2 NTV

Jesús al ser asesinado en una cruz, fue sacrificado bajo pensamientos alejados del conocimiento de Dios. Pero lo más asombroso de todo es que pensaron que habían “terminado” con este fruto, pero recuerden que las semillas de los árboles necesitan ser puestas en la tierra para que la vida permanezca.

El hombre pensó que había terminado con el Árbol de la Vida de una vez por todas y para siempre, pero no fue así, esta semilla pudo resucitar al tercer día; como él lo había dicho en Juan 12.Esto fue necesario para demostrar que el SEÑOR continúa estando cerca de nosotros una vez más, colocando aquel Árbol de la Vida que la rebeldía ni la muerte han podido detener, desde la historia de la creación, como con Moisés y la zarza, y ahora con Jesús. Y nos brinda una gran oportunidad, de la misma manera como en Génesis, para formar una nueva creación; transformando la vida de las personas que coman de este fruto.

La Gran Esperanza

El libro de Apocalipsis termina de la misma forma en la que inicia la Biblia en Génesis, así es, con un nuevo huerto. El autor lo describe de nueva cuenta como un templo, y el Árbol de la Vida está ahí; proporcionando fruto de vida para siempre y sanidad por medio de él.

y corría por el centro de la calle principal de la ciudad. A cada lado del río estaba el árbol de la vida, que produce doce cosechas al año, una por mes; y las hojas del árbol son para la salud de las naciones.

Apocalipsis 22:2 NTV

Estimado lector, espero que podamos reflexionar en esto, y ver que decisiones estamos tomando en nuestra vida. Hay decisiones que nos llevan a la muerte, pero solo una nos lleva a la Vida, no olvidemos que el Árbol de Vida aun es accesible para todo el que desee, y nos invita a comer de Él y vivir de Él; solo debemos voltear nuestro rostro para ver y comer del Árbol de la Vida; de esta forma nuestras vidas podrán ser transformadas por que se encuentran debajo de ese gran refugio, y nos cubre con sus bellas hojas de vida.

Espero sinceramente que podamos ver que fuimos creados para alimentarnos y depender de este hermoso Árbol, por lo que mi consejo es; vuelve y elige Vida.

¡Quiero agradecer a mi gran amigo Jack Vogt, por todo el tiempo que nos has estado enseñando de la Palabra; y a Lucy su querida esposa, por esas deliciosas reuniones con roles de canela, el SEÑOR los bendiga siempre!

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